Como jode tener que tragarse el vídeo de una boda por puro compromiso.
Y si estuviste presente puedes ver la cara de tus amigas, los bailes de quienes no suelen bailar, la borrachera que gastabas aquel día, o aquel cuerpazo que te cautivó... ¿pero si no conoces a nadie?
Todo vídeo tiene 2 partes básicas. Ceremonia y papeo.
La parte del papeo todavía tiene su punto, con toda la gente mamada, la novia desenfrenada, la tía soltera del novio completamente salida, el novio hundido, un colega metiendo fichas a las casadas... ¿Pero la ceremonia?
La ceremonia ES UN PUTO COÑAZO.
Pues bien, NO SIEMPRE.
Reconozco que esta entrada de la novia me ha emocionado y que incluso hubiera pagado por formar parte de la coreografía.
Seguro que ya habéis visto o habéis oído hablar de este video.
30 millones de visualizaciones, y sin necesidad de obligar a nadie a tragarselo (ya me entendeis) ¿no esta mal verdad?
Si algo demuestra es que no es necesario mucho dinero para hacer pasar un buen rato a la gente que asiste a tu boda, basta con tener una idea divertida y ser valiente para llevarla a cabo.
No hay mejor premio para los invitados que les sorprendan y les regalen un momento inolvidable.
Y no hay mejor premio para los protagonistas, que 30 millones de personas e incluso informativos, se hagan eco de su humilde hazaña.
Chapó.
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